TU PERSONALIDAD.

En una ciudad como Bogotá, matizada por diversas expresiones del vivir de la metrópoli, a través de sistemas llamados comúnmente tribus urbanas, surge una pregunta, creo que en cualquier persona racional; Serán de verdad felices estas personas que renuncian a expresarse libremente por tomar una postura comprada en el mercado de lo barato?
Asumir una forma de vestir, una forma de hablar, un genero musical, una doctrina, generalmente disociada del compromiso social y de los derechos humanos, lo mismo que de la dignidad del ser, será que da respuestas profundas y reales a la necesidad de encuentro con el propio ser interno?
A mi juicio estas posturas son solo el refugio que disfraza el abandono de quienes las asumen. No niego que como etapa previa a la autodeterminación de la identidad este puede ser un ejercicio valioso en los adolescentes, pero posterior a esto, debe haberse formado una personalidad única, individual, de pronto permeada por muchos factores y costumbres, pero lejana de estereotipos, en una mezcla maravillosa de agentes que hacen a cada ser único. Ser uno mismo y dejar de depender de otros, es una señal de madurez sicológica y espiritual.
Recalcaré que creo firmemente en la libertad individual, aun para adorar al Diablo, si estuviera en el senado seria el defensor de todos los cultos, aun los contrarios a mi fe, pero aclaro que, como lo dice San Pablo en el nuevo testamento, todo nos es lícito, mas no todo nos conviene. El enuncia un principio básico y natural de la conveniencia; buscar y hacer lo mejor para mi, lo que deriva en mejores resultados, lo que me edifica y edifica a los demás y esto es la esencia misma del amor.
El llamado de esta nota es a vivir la libertad de ser. Entender que no hay formas únicas aunque el espíritu que nos llene sea el mismo, pero se expresa de mil maneras, lo que es admirable, y que no hay uniformes, ni de Cristiano ni de mundano. Sé como tu lo auto determines, pero asumiendo la responsabilidad de ello, sin culpar a nadie. Se felíz.